sábado, 4 de julio de 2009

El color del acertijo

Nunca tuve un viaje tan feo como este. Siento que me muero. Siento que naufrago en lo más asqueroso al mejor estilo visceral, de mi ser. Siento que se pudre la piel, ahí donde el desierto envejece las ansias de vivir. Y que sin querer hablar del viaje, y sin pensarlo como a todo lo demás, acá estoy escupiendo los mas hermosos versos de mi vida. Los mas puros, como sacados ellos de lo mas profundo de los oleos con los que pintaron ese retrato de mi alma.
Y que en total oposición, acá me veo una vez mas golpeado por la apatía trancestral de mi yo en celo. Así que de ustedes me despido, tan formal, y con tal bajeza al caminar hacia la oscuridad de la cobardía.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Deberías pasar unos días en Posada Almayer, fantástico escondite dentro del Libro: Oceano Mar, de Alejandro Baricco.


Es mi libro preferido. Si te decides y lo lees, ten paciencia..puede costar al principio ponerte dentro de su mundo; pero tarde o temprano lo leeras y te atrapará..y desearás pasar unos días en esa historia y en ese lugar.


un abrazo desde Barcelona